jueves, 4 de noviembre de 2010

EXTRAÑA PRIMICIA

Hoy tengo un dilema. ¿Cómo contar esto? Veréis tengo fotos, información relevante, noticias, actores que aparecen y un largo etc. de la que podría ser la superproducción del año. Esto se debe a que un gran amigo al que considero un hermano está trabajando en ella. Y es porque lo considero un hermano por lo que surge el dilema, todo el material que tengo e información es confidencial de manera que no puedo decir nada sin buscarle problemas.
- No puedes contar nada.- me dijo muy serio.
- Pero Henry
(este nombre es falso, lo he puesto para despistar y no desvelar información de mi fuente), si está basada en una de mis novelas favoritas. ¡ya sé de qué va!
- Ya, ¿pero que quieres que te diga? Me prohíben hablar de ello.
- ¡Vale!, no digo nada ¿pero las fotos puedo publicarlas?
- Noooo. Las fotos tampoco puedes sacarlas a la luz.
A lo que voy es que me parece un poco absurdo tanto secretismo, sobre todo cuando han sacado el argumento de una novela muy famosa. Eso es como decir que no cuenten nada del señor de los anillos o no desvelen el final de Titanic.
En fin tendré que resignarme y no publicar nada. Poco a poco veré como otros medios se hacen eco de una información que ya conozco. Bueno pero dejaré una pista, es una superproducción Hollywoodiense con magia y capas.
Un Femur Henry, deja en esas extrañas costas tu marca.

viernes, 29 de octubre de 2010

ADIOS A LAS BRAGAS

¿Cansado de llevar ropa interior?
- Sí, yo es que eso de ponerme tanta ropa es que me da una pereza.
¿Arto de que los elásticos te dejen marca?
- A mí la marca me da igual, lo que me pasa es que cada vez que me desnudo, para las situaciones íntimas, tengo que esperar un rato a que la sangre llegue por culpa del dichoso elástico.
¿Hastiado de que el sujetador de tu ligue de turno se te resista y pierdas un tiempo valiosísimo en desabrocharlo?
- Pues mira, ahora que lo dices, a mí es que me echa para atrás. Se me quitan las ganas de meterle mano. Mira churri cuando quieras que te metan mano no te pongas sujetador.
Entonces tu sitio está en Castellammare di stabia. Parece ser que en esta ciudad de Italia impera la decencia y el decoro. En ella el alcalde ha promulgado unas normas un tanto peculiares. Multa de 25 a 500 euros a aquellas personas que vistan con vestidos demasiado cortos, con bañador, con pantalones con la cintura demasiado baja, con minifalda y/o con escote. Alguno de vosotros se preguntará:
- ¿esto que tiene que ver con la introducción?
Y yo contesto
- sigue leyendo impaciente que ya llego al meollo del asunto.
Después de leer la noticia entera, la verdad es que no sé qué es lo realmente pretende este hombre. Me explico, en un comunicado el alcalde ha declarado lo siguiente:
“no es una prohibición por las prendas de vestir. Lo que se va a multar es que se muestre la ropa interior. La minifalda no está prohibida. El reglamento habla de vestidos demasiado cortos y, por tanto, los que dejen descubierta la ropa interior", aclaró el alcalde.
Por lo que veo es un pueblo fabuloso para los mirones. Porque la solución para evitar multas es no llevar ropa interior.
- ¿Dónde vas este año de vacaciones?
- No lo sé, con la crisis no tengo nada que ponerme.- responde compungida la amiga.
- No te preocupes, en Castellammare no necesitas ropa. Puedes ir desnuda siempre que no enseñes las bragas.
Aunque estas nuevas normas sean un reclamo turístico. ¿Qué mirón va a resistirse ir a un pueblo en el que nadie lleva ropa interior?

Aquí os dejo con una foto de las causantes de tanto escándalo.

viernes, 27 de agosto de 2010

Erase una vez el western









Después de una semana por fin se hemos terminado el rodaje de "erase una vez el western". Un rodaje divertido y caliente. Lo de divertido lo digo porque ¿quién de pequeño no ha jugado a vaqueros? Pues este ha sido mi trabajo estos días, me he pasado una semana jugando a vaqueros, disparando mi revolver. Lo de caliente, no vayáis a pensar mal (aunque bien podrías si conocierais a la actriz), lo digo por la temperaturas, con una media de 40 grados y vestido con ropa de manga larga, un abrigo y un pañuelo anudado al cuello, me sentaba frente a una hoguera en medio de un paraje sin ninguna sombra. Con un equipo fabuloso (actores, técnicos, especialistas, maquilladora, director, chofer, transportista, catering, un conejo y la colaboración especial de las avispas que han mantenido a raya al chico del catering).

El trabajo con mis compañeros de reparto (David y Medus… ¡huy perdón me he equivocado! David y Sonia) ha sido fantástico, nos hemos reído y divertido. Con Sonia, chica con la que trabajo por primera vez, he entrado en confianza gracias a mi adulación, todo hay que decirlo, y piropos constantes, de manera que ella estuviera a gusto durante la grabación.

Ha David ya lo conocía hace años de manera que no ha habido ningún problema, salvo que se ha cargado la dirección de su coche.

El equipo técnico ha trabajo estupendamente, el cámara, todo un profesional, lo mismo grababa, tomaba fotos (aquí dejo una muestra) montaba y desmontaba escenarios, comía jamón, etc. Sonido muy profesional, aunque las chicharas de turno han puesto la banda sonora. José (el chico bocatas) dejando que las avispas le picaran a él para que los demás pudiéramos comer tranquilos. La maquilladora que pacientemente se pasaba cerca de dos horas todos los días maquillándome, los especialistas que se han encargado de los impactos y de tener controlado el fuego. El transportista que ha puesto la nota de humor, el director que pacientemente ha soportado como los actores cambiábamos el texto cuando nos apetecía y Amador que era el único que trabajaba. Tengo que hacer una mención especial a las avispas que cada día eran más, las muy cabron… corrían la voz entre las avispas de otros panales:

- He chicas han venido un grupo de panolis y traen comida y bebida.
- ¡Vamos!- contestaron varias- avisamos a las otras y nos vemos allí.
Ahora que el rodaje ha terminado queda esperar la postproducción.

¡ TE HARÉ FAMOSO!

DIARIO DE UNOS MELLIZOS PRIMERIZOS

Primeros quince días de Pedro y Julio en casa; han sido unos días de adaptación, tanto nuestra como de ellos. Nos hemos conocido, descubierto nuestras singularidades y disfrutado de momentos únicos e irrepetibles. Cuando llegaron a casa el peso de ambos rondaban los dos kilos escasos 2,080 kg. Aproximadamente Julio y 2,030 Pedro. Después de dos semanas el peso de los dos ha subido unos ochocientos gramos; el peso de Julio está en 2,890 y el de Pedro en 2,830 kg. Hemos visitado dos veces al pediatra del centro de salud y hemos repetido la prueba del talón en la residencia.

En este resumen de la primera quincena solo hablare de su estancia en casa, sin tratar los días anteriores en la residencia, y de la evolución que han tenido.

En primer lugar hay que decir que cuando nos dieron los niños rondaban los escasos 2 kg, cosa extraña cuando lo normal es dar el alta a los niños cuando han llegado a los 2,5kg. Pero bueno eso es algo que no nos preocupa mucho, los niños van ganando peso y eso es lo importante. Cuando nos dieron el alta unas enfermeras se acercaron a nosotros y muy amablemente nos dieron la comida de los niños para un mes, un detalle que nunca olvidaré. Pero a lo que iba, montamos a los niños en el coche y pusimos rumbo a casa. Desde ese momento los días y las noches se empezaron a mezclar; las tomas son cada tres horas y tardamos una hora en hacerlo, aunque después de 15 días el tiempo que tardamos en dárselas se ha reducido y ahora apenas tardamos cuarenta y cinco minutos. Apenas tenemos una hora y media entre toma y toma para dormir, porque no solo es darles el biberón; también hay que hacerlos eructar, cosa que puede llevar media hora; cambiarles los pañales; cambiarles la ropa, que no sé cómo se las arreglan pero siempre se ponen perdidos de leche y limpiar las tetinas y biberones, para que a la siguiente toma (poco más de hora y media después) esté listo para volver a empezar. Tras este ritual nos acostamos a dormir (ya da igual que sea noche o día) y como buenos primerizos nos despertamos ante cualquier sonido de los niños y pasamos horas mirándolos.

Julio, el mayor, es tranquilo, duerme, se toma sus biberones y no se queja de nada, bueno de casi nada, parece que le molesta su hermano y cuando lo acostamos en la posición en la que está mirando a su hermano, se lía a patadas con él. Después de unos días en casa, ha descubierto a su archienemigo y no, no me refiero a su hermano (que después de un enfrentamiento de ambos la cosa parece que se ha calmado. Los pusimos cara a cara un día, se liaron a guantazos y a patadas, desde entonces la tensión se a calmado) con archienemigo me refiero a la razón de su existencia, lo que lo motiva para seguir adelante y por lo que se ha aliado con su hermano, al ser más peligroso del mundo, a la abeja que hay bordada en la chichonera de la cuna. Se tira horas intentando agarrarla sin conseguirlo, pero él sabe, en su fuero interno sabe que algún día lo conseguirá.

Pedro, el menor (un minuto), ha hecho suyo el dicho "quién no llora no mama". ¡La madre que lo…! No aguanta una, ha descubierto que cuando abre la boca está en brazos y le encantan los brazos. Levanta la mirada y se pone a dotorear. Pega unos berridos que parece que el mundo se esté acabando, no me extraña que Julio se lie a patadas con él cuando tiene ocasión. Y en cuanto a comer ¡me cago en la le…! Si parece un saco roto, he pensado en ir al hospital a ver si se han equivocado o algo y me han dado al hueco. Cada hora y media o dos horas, voz en grito reclama su sustento, sustento que le tiene que dar su madre porque no consiente comer con nadie que no sea su madre, cierra la boca, aprieta las mandíbulas y hasta que no se pone su mamá a darle el biberón no come. La relación con el hermano es buena (por su parte) cuando es él el que está en la posición que mira a su hermano, se acerca poco a poco a este para tocarlo, entonces, cuando consigue tocarlo o juntarse a él, se relaja y se duerme.

Julio y Pedro con sus padres. Se turnan, quiero decir que cuando uno duerme el otro la lía. De 21 horas a las 4 de la madrugada y de 15 a 18 horas uno de ellos no nos deja dormir y al día siguiente este duerme como un bendito y es el otro el que toma el relevo. Bueno os quedan las "entre tomas" de las mañanas para dormir diréis algunos. ¡Pues no! Porque esas horas parecemos la centralita de teléfonos, abuelas y abuelos llaman para preguntar por las criaturas, y ¿quién es el guapo que les dice que no llamen? Que te tildan de mala persona, que no quieres que vean a sus nietos, que ya sabían que molestaban, que esto, que lo otro… pero hasta aquí la primera quincena en casa de mis dos bichos, ardillo (Pedro) y lagartijo (Julio), motes puesto por los sonidos que hace Pedro y por los movimientos que hace Julio.

martes, 25 de mayo de 2010

EPISODIO 4. De chicos, chicas y nombres

Después de descubrir al mundo la buena nueva, y de salvarme momentáneamente de la vasectomía, los días siguen pasando a la espera de saber si son dos chicos, dos chicas o chico y chica. Porque, eso sí, hemos aumentado las variables de sexo de nuestros hijos a tres, ya que son gemelos bicigóticos. Vamos lo que comúnmente se llama mellizos; cosa que descubrí después de un par de errores al denominarlos, y que por el tono de ella, la ginecóloga, ya me veía yo después del recreo escribiendo en la pizarra "los mellizos no existen, se llaman gemelos bicigóticos" doscientas veces.

- Aquí se ven los dos sacos – nos muestra la ginecóloga.

- ¡son mellizos! – contesto yo.

- ¡los mellizos no existen! – me corrige la ginecóloga.

- "entonces que es eso que estoy viendo"- pienso yo, amedrentado y sin decir palabra por miedo al castigo.

- Se llaman gemelos bicigóticos o bivitelinos.

- ¿pero están sanos?- yo asustado e imaginándome, después de oír ese nombre, a los niños vestidos de oscuro, con capas negras, maquillaje blanco y ojeras marcadas, montando en bici.

Pero a lo que iba. Con tal variedad, la elección de nombres se complica (dos nombres de chico, dos nombres de chica, que nombre de chico y que nombre de chica sin son un niño y una niña).

En un principio, sin son chicos, me decanto por nombres que asusten a los profesores en el colegio, a las madres en el parque, etc. Atila y Aníbal:

- ¡Atila, Aníbal!- llamando a los niños en el parque- a merendar.
Mientras las otras madres asustadas al oír unos nombres que no presagian nada bueno, recogen a sus hijos.
- ¡corre, Kevin! Nos vamos a casa.
También hemos barajado nombres teniendo en cuenta la fecha de nacimiento. Al salir de cuentas el 4 de julio los nombres debían estar acordes con la simbología de esa fecha y por ello teníamos pensado en Fidel y Hugo. Pero si se adelantan (lo más probable) y nacen para mediados de junio, correspondiendo su horóscopo a géminis (los gemelos), Enric, un buen amigo, me recomendó los nombres de Castor y Pólux (que es el nombre de los gemelos de géminis).

En el caso de ser dos chicas se complica más la elección del nombre, ya que los grandes personajes clásicos femeninos tienen mal sino (Electra, Medea, Casandra, etc.).
Finalmente optamos por Pedro y Julio si son chicos; Amelia y Jimena si son chicas; Pedro y Amelia sin son niño y niña.
Visita a la ginecóloga, cosa bastante habitual, comienza con la ecografía y yo, bastante ilusionado salto y digo:
- ¡es un chico!-

Y la ginecóloga contesta que eso que veo es el cordón umbilical.
Vaya decepción. Lo que iba a presumir de hijo bien dotado.
En la siguiente visita no puedo ir y es mi madre la encargada de acompañar a Lucía a la ginecóloga. Esta vez es Lucía la que dice que es un chico.
- Te ha pasado lo mismo que al padre. - replica la ginecóloga.
A lo que mi hijo le responde abriendo las piernas de par en par y dándose a conocer en todo su esplendor. "soy un chico y me llamo Pedro".
Al salir, las recojo, y con una sonrisa de oreja a oreja Lucía me lo cuenta todo.
El otro bebé, más tímido, nos hace esperar un mes más para decirnos su sexo. Otro chico, Julio.


lunes, 10 de mayo de 2010

EPISODIO 3. EL CURRICULUM

Los días van pasando y todo transcurre con normalidad, si a normalidad llamamos pasarse el día agarrada a la taza del WC sin parar de vomitar. A los padres de ella no le hemos dicha nada todavía (lo de que son gemelos), esperamos a cerciorarnos. A mí me lo ha dicho y he visto la ecografía, pero hasta que no los vea con mis propios ojos en la consulta de la ginecóloga no me voy a convencer. Llega el temido día, salgo del trabajo y voy corriendo a la consulta donde me espera Lucía. Después de pedirle al DNI a la doctora para asegurarme que es mayor de edad y el título para comprobar que es ginecóloga y que no estamos esperando a su padre para ser atendidos, compruebo que efectivamente son dos, aunque todavía no sabemos el sexo. Durante la consulta aguanto las acusaciones de Lucía y la ginecóloga de mi supuesta culpa y responsabilidad por haberla dejado embarazada de gemelos y de haberla engañado por no avisarle de que tengo antecedentes en mi familia:

- Eso se pone en el curriculum. Lo llegas a poner cuando me conociste y te aseguro que no me dejas embarazada.
- Pero si ya sabías que en mi familia había gemelos-
le contesto.
- Sabía lo de tus hermanas.
- Pues ya está.-
Contesto satisfecho, la verdad salía a la luz.
- Pero no me habías dicho que tenías primas gemelas.
- ¿a no?- y la verdad seguía saliendo.
- ¡no! Ni me habías hablado de tus bisabuelos los gemelos.- y continuaba saliendo verdad por todas partes.
- Bueno pero eso yo también lo desconocía.
- Pero si hasta hay trillizos en tu familia.- ya era suficiente dosis de verdad por un día. Decidí callarme y bajar la cabeza.
Al salir de la consulta nos dirigimos a casa de los padres de Lucía. Había llegado el momento de decirles que eran dos. Los padres de Lucía no se lo toman muy bien que digamos. Nuevamente me culpan a mí de todo:
- La culpa es tuya.- dice mi suegro.- en mi familia somos todos muy ordenados y las cosas las hacemos de una en una.
- Pero oiga, que ella también ha participado. Y que yo recuerde para que una mujer se quede embarazada se necesitan óvulos y yo de eso no tengo.
- Te haces la vasectomía.-
suelta mi suegra de repente.
- ¿eh?- digo yo
- Esto no puede repetirse. A ver si por accidente nos encontramos con cuatro niños.
Me alejo disimuladamente de ella y compruebo que no tenga ningún cuchillo en la mano. Me encuentro en una situación apurada, en tierra hostil, rodeado de tres personas que han decidido, así por las buenas y sin contar conmigo, hacerme la vasectomía.

martes, 2 de febrero de 2010

Diario de un embarazo 2. ¡aaaaaaaaaaahhhhhhhh!

Día 2 de noviembre: ese día tengo rodaje de "el gran Vázquez". Lucía me acerca al trabajo y se marcha a trabajar. El día transcurre sin mayores incidentes hasta que me recoge a la noche y me cuenta que ha tenido un accidente con el coche, al parecer un camión le ha dado por detrás y ha destrozado la parte trasera del coche pero que ella está bien. Ha ido a urgencias y allí le han realizado una ecografía, me la enseña y en ella puedo ver al embrión de Pedro. Emocionado miro la ecografía como si de un Rembrandt se tratara. Al día siguiente llevo la foto de la ecografía a casa de mis padres para darles la buena nueva. Emocionados nos abrazan y se ponen a buscar parecidos en la foto, yo muy orgulloso de parecerme a ese punto. A los padres de ella no se lo hemos contado, preferimos asegurarnos y esperar a la visita del ginecólogo.

Los días pasan, dos semanas, y el 18 de noviembre tiene su primera cita ginecológica. No puedo ir, de manera que me paso el día pensado en la misma. Termino el trabajo y la llamo.

- ¿Qué tal todo?
- Bien.
- ¿Has salido? ¿voy a por ti?
- Sí, no, ya hablamos en casa.
- ¿ocurre algo? ¿va todo bien?
- No te preocupes todo va bien.
- Cuelgo y voy a casa.
Al poco de llegar a casa aparece Lucía y viene acompañada de mi hermana quién sujeta el teléfono como si se tratara de Scarlata o'hara con el rábano en la mano, cosa a la que no presto mayor atención. A continuación Lucía me hace el símbolo de la victoria con la mano. -"que bien, eso significa que todo va bien"-pienso yo. Mi hermana situada con el teléfono frente a mí, mi cerebro comienza a trabajar a marchas forzadas y puedo sentir como el engranaje gira, pero hay una pieza que se niega a encajar.
- Pero. ¿está bien?
- Sí.- me contesta Lucía- los dos están bien.
El tiempo se detiene, mi hermana, que ha tenido un momento de distracción intenta hacerme una foto.
- ¿eh?- pregunto en un alarde de ingenio.
- Dos.- responde Lucía con paciencia.
- JA JA.- continuo.- muy graciosas, buena broma, ya nos hemos reído todos ahora vamos a dejarnos de tonterías.
- Después de buscar la cámara oculta durante un rato comienzo a asimilar la noticia. Me enseña la nueva ecografía y allí veo el doble de sacos embrionarios que dos semanas antes.
- A la noche, dos horas después, decido llamar a mi buen amigo Enric y contárselo, es el primero fuera de la familia que se entera. A mis padres ya se ha encargado mi hermana de darles la noticia y a los padres de Lucía… bueno esa misma noche se lo contamos, pero empezamos con "el gato se ha subido al árbol…" lo de los gemelos lo dejamos para la siguiente revisión médica.